Los chorros de radiación que se desprenden de estas erupciones fueron detectados por el satélite Solar Dynamics Observatory de la agencia espacial estadounidense a las 09:10h GMT y 12:02h GMT, dos horas más que en la España peninsular, respectivamente.
Las erupciones llamadas de “categoría X” generaron problemas en las comunicaciones de radio de alta frecuencia durante una hora en el lado de la Tierra situado frente al Sol y también en las de baja frecuencia utilizadas en la navegación. Además, pueden alterar el funcionamiento de los satélites de comunicación y el GPS, así como las redes de distribución eléctrica al alcanzar la atmósfera superior de la Tierra.