La pandemia de COVID-19 ha interrumpido los servicios de salud esenciales en la mayoría de los países y territorios de América Latina y el Caribe, advirtió Carissa Etienne.
La pandemia de COVID-19 ha interrumpido los servicios de salud esenciales en la mayoría de los países y territorios de América Latina y el Caribe, amenazando la inmunización de los niños y el cuidado de las mujeres embarazadas y las personas con enfermedades crónicas, advirtió la directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa F. Etienne.
“Por lo tanto, instamos a los países a que se aseguren de que sus respuestas al COVID-19 no dejen atrás otros servicios de salud esenciales, como las inmunizaciones de rutina”, dijo la Dra. Etienne en su conferencia de prensa semanal. “Estos servicios no son opcionales”, dijo, y agregó que la OPS está ayudando a los países a “ajustar y repensar cómo se brinda la atención esencial en el primer nivel”.
Dijo que más de 300.000 niños, la mayoría en México y Brasil, no han recibido las vacunas de rutina, “dejándolos vulnerables a infecciones mortales pero prevenibles”.
“La cobertura de la primera dosis de la vacuna contra el sarampión se redujo en un 10% en ocho países de las Américas, incluidos Venezuela, Panamá y Brasil, y descendió hasta en un 20% en Surinam”, continuó. “Si no revertimos estas tendencias, corremos el riesgo de una avalancha de empeoramiento de los problemas de salud”.
Agregó que en una encuesta reciente de los servicios de salud en la región, el 97% de los países y territorios participantes informaron servicios de salud interrumpidos, mientras que el 45% informaron interrupciones en al menos la mitad de sus servicios de salud.
“Pronto, COVID-19 no será la única crisis de salud que demandará la atención de los países”, dijo el Dr. Etienne.
La OPS está apoyando a los países en la búsqueda de alternativas para la prestación de servicios de salud. Muchos sistemas de salud, incluidos Chile y Perú, han adoptado la telemedicina, mientras que otros han lanzado programas de extensión comunitaria para que los pacientes puedan recibir atención médica mientras están en sus hogares.
El Director de la OPS aconsejó a los países que contraten y capaciten personal adicional para que todos los trabajadores de la salud tengan las herramientas y los recursos para brindar atención de manera segura. Al afirmar que los trabajadores de la salud deben ser “compensados de manera justa por sus esfuerzos extraordinarios”, dijo que Chile aprobó recientemente un aumento salarial para los proveedores que han sido críticos para la respuesta COVID-19.
“Sabemos que el retroceso económico de esta pandemia está obligando a los países a tomar decisiones difíciles sobre dónde priorizar el gasto, pero no podemos permitirnos el lujo de recortar gastos en salud”, dijo.
“Es por eso que invertir en el primer nivel de atención ahora es una opción inteligente para que podamos revertir las tendencias de manera más eficiente y equitativa que si esperamos a que surjan las crisis de salud”, dijo. “Como dice el adagio: ‘más vale prevenir que curar’”.